Durante
el fin de semana por fin tuve la oportunidad de ver la película de Mente
Brillante (Beautiful Mind). Dirigida por Ron Howard y protagonizada por Russell
Crowe.
Basada en
la historia real de John F. Nash, ganador del premio Nobel de Economía en 1994,
Una mente brillante nos muestra la Vida de Nash desde su entrada a Princeton.
Obsesionado por desarrollar una idea nunca antes concebida y no aplicaciones de
la teorías Nash llega concibe la teoría de juegos donde los jugadores modifican
su estrategia para ganar y donde nadie gana si alguno de los jugadores no
modifican su estrategia de manera determinada.
Gracias a
su teoría, ganó respeto en la universidad, consigue un trabajo en con el
gobierno de Estados Unidos para descifrar información de un intento de invasión
ruso. A pasar del tiempo John se percata que padece de esquizofrenia, lleva su
servicio a la nación más allá y asegura ser perseguido por espías rusos y crear
amigos imaginarios que lo alientan en sus alucinaciones, el padecimiento lo
aleja de su esposa y le obliga a estar hospitalizado por periodos largos. Su
inteligencia, meramente matemática no se encuentra balanceada con otras
inteligencias. Pero, a final de cuentas, logra manejar sus compensar sus
deficiencias y logra recuperar su vida, regresa con su esposa e hijo, logra el
reconocimiento de los catedráticos de la Universidad y gana el Premio Nobel.
Una parte
de la película que para mi es fundamental para relacionarlo con el tema de la
visión estratégica es en la que John observa como alumno en el comedor de
Princeton como una persona es reconocida por la comunidad universitaria. Al
lugar de este personaje acuden muchas personas a entregarle su pluma como
muestra de reconocimiento. Para John, este es un crisol, un momento de
transformación que lo deja marcado y que
en los años venideros le marcarían el rumbo de lo que él quería hacer con su
vida.
En
general, recomiendo ampliamente la película. Yo ya la había visto, pero sin
lugar a dudas siempre se pueden descubrir nuevos ángulos a la trama y matices a
los personajes centrales.