¿Y tú que #&$%/ sabes?

Esta semana nos tocó ver la película ¿Y tú que #&$%/ sabes? (What the bleep do we know?) Fue concebido,  financiado y producido por  William Arntz, quien co-dirigió la película junto con Betsy Chasse y Mark Vicente.

Se trata de una película tipo documental donde algunos estudiosos de la mecánica cuántica exponen sus teorías y perspectivas acerca de la relación de la física cuántica y la consciencia humana.

Inicia la película abriendo un poco la imaginación ¿Es el universo más vacío que materia? ¿Y que hay de los sólidos? En realidad son un montón de átomos separados uno del otro, más aún, los núcleos de los átomos tienen componentes también. Estas y otras preguntas nos abren la perspectiva para la pregunta final. ¿Son las cosas realmente lo que son o son lo que percibimos? A final de cuentas nuestro mundo lo formamos principalmente con lo que alcanzamos a percibir: los colores que alcanzamos a ver, los sonidos que alcanzamos a escuchar y la interacción con las demás personas hasta donde nuestra educación y memoria nos alcanza. Desde esta perspectivas cada quién tenemos una versión distinta del mundo que nos rodea y el mundo real a su vez es diferente a cualquier percepción.

En esta primera parte relaciono la visión estratégica con la necesidad de abrir la mente para imaginar nuevas posibilidades. Muchas de las formas de hacer negocios, o de llevar a cabo proyectos, son sólo paradigmas creados por reconocidos expertos y casos de éxito en algunas empresas. Sin embargo, en más de alguna ocasión hemos sido testigos de organizaciones que han encontrado su propia forma de hacer negocios (Southwest y sus vuelos punto a punto con excelente servicio personalizado, por ejemplo).

La segunda parte de la película está más enfocada a las neurociencias, explica de forma detallada como cada sentimiento que tenemos es un químico diferente segregado por el hipotálamo. Si un mismo sentimiento se repite con frecuencia, nuestro organismo se acostumbra y crea una necesidad por segregar de nuevo dicha sustancia. Esto es, si nosotros tenemos recurrentemente sentimiento de tristeza el organismo buscará situaciones en las que se pueda generar el químico relacionado. Bajo esta teoría, nosotros mismos podríamos estar auto saboteando nuestra vida si no rompemos con el círculo vicioso, luego entonces, si buscamos el lado positivo de las cosas más tarde nuestro cerebro decodificará las señales externas de forma que éstas nos sean agradables.

En general me pareció una buena película pero por el contenido y cantidad de información sugiero que lo vean durante el día y bien despiertos porque si no se corre el riesgo de un salto cuántico del minuto 30 a los créditos finales en un solo pestañeo.